Joel Spira es el creador de la domótica como tal. O al menos el que empezó a montar este sistema gracias a sus conocimientos técnicos. Fue en 1984 cuando apareció lo que consideramos la primera aproximación a la domótica. Fue, por supuesto, en Estados Unidos y se extendió rápidamente a países como el Reino Unido y España.
Hay muchos precursores de la domótica. Y también sistemas que podrían haber sido pioneros. En ese momento, los comunicadores para bebés llegaban a los hogares, pero mucho antes, en otro tipo de edificios, ya se habían puesto en marcha sistemas para enlazar los dispositivos mediante cables. El primero en utilizar la domótica fue el programa SAVE (1984). Se llevó a cabo en Estados Unidos y sirvió para poner la primera piedra en el tan ansiado camino del ahorro y la eficiencia energética.
El programa SAVE funcionaba con el protocolo X10, que permitía realizar ciertas acciones por control remoto. El nacimiento del protocolo X10 también es relevante: se introdujo en 1975 a través de “Telecontrol”. Fue el primer protocolo de automatización del hogar -los protocolos cerrados llegarían poco después- y su “sencillez y accesibilidad” provocaron una fuerte penetración tanto en Estados Unidos como en algunos países europeos.
Hoy en día, el X10 no ha desaparecido, sino todo lo contrario. Cientos de empresas siguen trabajando con él, aunque la aparición de otros protocolos abiertos le dificulta mantener su importante cuota. Este tipo de progreso (la automatización y la domótica en general) nació y se desarrolló a partir de la necesidad de encontrar el hogar ideal, que se esperaba mucho antes de que los smartphones y las tabletas dominaran la escena.
¿Quién era Joel Spira?
En 2015, el inventor de la domótica nos dejó a los 88 años, un título que nadie discute. Spira adquirió poderosos conocimientos después de alistarse en la Armada y lo reclutó para crear un sistema basado en las ondas de radio para detectar a los enemigos. Al parecer, la bombilla de la domótica se encendió después de trabajar en un sistema de fusibles para bombas atómicas. El caso es que se olvidó del segmento militar y en 1961 creó Lutron Electronics, su propia empresa.
A Spira se le atribuye la creación del atenuador sensible al estado de ánimo. De hecho, las primeras etapas COMERCIALES de la domótica se basaron en este tipo de tecnología: la regulación de la temperatura o de la luz en edificios de oficinas, que sólo empezaron a llamarse “inteligentes” por este tipo de avances. Pero el legado de Spira no ha hecho más que empezar.
Los reguladores fueron los primeros en llegar, pero el hecho de que el propio Spira siguiera trabajando el día antes de su muerte -él y sus ingenieros estaban trabajando juntos en sistemas inalámbricos para hogares inteligentes- demuestra que hay mucho que inventar cada día en el campo de la domótica. Treinta años -o más- después de su realización, la domótica sigue progresando a gran escala, sobre todo gracias a las redes wifi.
Automatización del hogar de primera generación
También Spira pudo aprovechar todo lo que puede aportar un ordenador moderno. Con la llegada de estos dispositivos, comenzaron a aparecer los primeros sistemas de cableado estructurado (SCE), diseñados para facilitar las conexiones entre terminales y periféricos.
Pero no sólo se conectaban los ordenadores, sino también ciertos dispositivos de control, con un objetivo que sigue siendo el mismo hoy en día: facilitar todos los procesos posibles a las personas en los hogares y edificios.